La iniciativa buscó coordinar acciones entre Naciones Unidas y los gobiernos de Guatemala, Honduras y El Salvador en función de tres áreas claves que exigen a estos gobiernos respuestas rápidas en el corto plazo:

• Fortalecer los mecanismos de reintegración social y económica para    migrantes que retornan
• Fortalecer los mecanismos de protección y prevención de la violencia
• Complementar la política de seguridad ciudadana con acciones para la inclusión social, el fortalecimiento de la administración de justicia y el intercambio de información.

El proyecto buscó abordar dificultades especificas enfrentadas por mujeres, niñas y adolescentes, incluyendo actividades y presupuestos específicamente asignados a victimas mujeres.

Objetivos y actividades específicas en materia de reintegración:

• Contribuir al fortalecimiento de las instituciones encargadas de las plataformas de información existentes para registrar, perfilar e identificar las necesidades de las personas que retornan y, específicamente de las poblaciones especialmente vulnerables
• Conectar a las personas que retornan con programas y políticas sociales existentes
• Detectar las brechas en los programas existentes y facilitar el diseño de nuevas intervenciones que cubran estas brechas
• Implementar acciones para fortalecer los mecanismos de seguimiento a la población retornada para facilitar su inclusión económica
• Implementar acciones dirigidas a fortalecer la oferta de programas relevantes para la reintegración de la población retornada.